En Qatar la albiceleste,
gran festejo en su verano,
van por otro los purretes
con el Jefe Mascherano.
No es un cuadro de Picasso,
ni una pieza de Moliere;
por momentos va sin agua
la barcaza de Javier.
Pero atenti los escollos
a él le vienen al dedillo;
como hacía con los cortos,
hoy aflora el gran caudillo.
Ya no calza los botines,
su laburo es de instrucción;
y los pibes en el campo
hallarán la solución.
Salga pato o gallareta,
será crack, yo no lo sé;
pues la vara está muy alta,
colocada por José.
Librepensamiento
Si atraco a un político, ¿es un robo o un reembolso?